La decisión se ha tomado después de que una investigación realizada por una universidad de República Checa afirmara que el chip de los DNI podría ser vulnerable a hackeos, informó Europa Press.
A pesar de que hasta la fecha no se ha registrado ningún ataque, la Policía ha decidido deshabilitar la función electrónica hasta que consigan mejorar la seguridad. Los DNI a los que afecta esta medida son aquellos expedidos a partir de abril de 2015 y los que tengan un número de soporte superior a ASG160.000.
Los documentos siguen siendo válidos como documento de identificación oficial tanto para trámites administrativos como para viajar por la Unión Europea.