De este modo, todos los usuarios de MOVISTAR FUSIÓN subvencionan una opción de contenidos carente de interés para bastantes abonados a cambio de un incremento de ingresos.
Es evidente que la compra de derechos de retransmisión del fútbol se le está indigestando a la compañía que ya no sabe lo que hacer para rentabilizar una inversión que nunca debió realizarse, al menos en los términos que se llevó a efecto.
La compañía tiene una complicada papeleta entre manos, será difícil rentabilizar una inversión en la que, al menos en los términos en los que se llevó a cabo, nunca debió embarcarse. Resulta evidente que la compra de los derechos de retransmisión del fútbol le está pasando factura porque entre los 2.400 millones que ha pagado por las próximas temporadas de la Liga, la Champions y la Europa League y los 600 correspondientes al pago pendiente de la Liga 2015-2016, la compañía de televisión de pago ha ingresado 113 millones menos de los esperados a finales de 2015.
Como se recordará, el Gobierno y la Liga decidieron elaborar una norma para proceder a la venta centralizada de los derechos del fútbol con lo que se pretendía sanear la situación de los clubes para satisfacer sus obligaciones ante la Hacienda Pública. Si tiene o no algo que ver la oferta conjunta de A3 MEDIA Y MEDIAPRO con el papel que desempeña ese grupo de comunicación en el plano de la política actual es algo que queda a la consideración de cada uno. De la misma manera que también debe quedar a su consideración si responde o no a este interés la regulación elaborada a la limón por la Liga y el Gobierno con su socio MEDIAPRO.
Tras atender las recomendaciones del supervisor para la comercialización de los restantes partidos de la Liga y la Copa del Rey de la temporada 2015-2016 -Movistar pagó 600 millones y Mediapro 636 para su distribución en el exterior-, se negoció la explotación de las siguientes tres temporadas. MEDIAPRO, que ya controlaba los derechos de la Champions, se hizo con los derechos de esas tres temporadas por 1.900 millones pese a la denuncia de los usuarios sobre el funcionamiento de su plataforma, BEINSPORT.
En un movimiento cuya rentabilidad a priori resulta cuestionable, MOVISTAR pagó a MEDIAPRO 2.400 millones para hacerse con la retransmisión de las próximas tres temporadas de la Liga, las dos siguientes de la Champions y la Europa League, y las principales ligas internacionales.
Las cifras son claras, entre 2015 y 2018, MOVISTAR desembolsará un total de 3.000 millones de euros por los derechos de emisión del fútbol. Para hacer frente a esa cifra, la compañía ya ha iniciado una estrategia para que sean sus casi 4 millones de abonados los que asuman el coste de tan arriesgada apuesta. Esta estrategia no sólo resultará compleja sino que además deberá superar el examen de organizaciones y autoridades de consumo en relación con su legalidad.
Desde que surgió FUSIÓN, los abonados han sufrido en mayo de 2015 una subida de 5 euros. En febrero de 2016, un incremento de 3 euros de la cuota mensual de los productos de Fusión y una subida también de 3? de la cuota mensual de las Líneas Móviles Adicionales asociables a los empaquetamientos Fusión. En mayo de 2016 el paquete series paso de 5 a 7 euros y el paquete cine de 9 a 10.
A ello hay que añadir otros cambios: el precio de los SMS, datos en pago por uso o el contestador.
Por último, a las asociaciones firmantes no nos resulta comprensible que la CNMC pueda validar esta nueva subida en un producto cautivo como la fibra.
