La Embajada estadounidense en Madrid tiene localizado desde hace años a este grupo -de forma algo difusa- dentro de la masa de usuarios de la Red. Aunque no es consciente de quiénes o cuántos son, sí sabe, por ejemplo, que no les gusta nada la ley Sinde y tiene la idea de que defienden la piratería sin límites y el gratis total.
"No hay muchos"
La primera vez que se alude en los despachos de forma significativa a los llamados "internautas" es el 19 de noviembre de 2007; y con evidentes connotaciones políticas.
En un cable confidencial, Hugo Llorens, segundo de la delegación en España, insinúa antes de desgranar los detalles de la conferencia bilateral sobre propiedad intelectual que tuvo lugar previamente en Madrid, que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero "es sensible" a la opinión y las acciones de los "internet surfer groups" (internautas) y los "consumer groups" (consumidores) por el "posible daño político" que pudieran causarle de cara a las elecciones generales de marzo de 2008.
"No hay muchos españoles" que pertenezcan al colectivo de los internautas, explica Llorens, aunque "tienen un impacto mediático desproporcionado". El Gobierno, apunta el cable, "hace malabarismos" para intentar buscar un equilibrio entre el incremento de la penetración de la banda ancha en España, "beneficiando así a Telefónica" -en junio de ese año se contabilizaron "5,9 millones de líneas" de alta velocidad-; el freno a la piratería -por convicción y porque querían que el país permaneciera fuera de la famosa Lista de Vigilancia 301-; y la "contención" de una reacción negativa por parte de los usuarios en caso de sacar adelante una regulación.
Campañas contra ministros
EE UU resalta en sus comunicaciones que el "lobby" internauta protagonizó una serie de protestas en su día contra el ministro César Antonio Molina -alguna en la calle y la campaña Molina pírate en Internet-; y después contra Ángeles González Sinde, que le sucedió en el cargo el 7 de abril de 2009 y cuyo nombramiento fue tomado como una "declaración de guerra". EE UU no creía, en cualquier caso, que a Rodríguez Zapatero le afectara todo esto, pero sí se fijó en que González Sinde decidió mantener un "perfil bajo" durante sus primeros meses de mandato para no agitar el ambiente.
Aunque en algunos comentarios los responsables de la Embajada tildan de "exagerado" el miedo que parecen tener, por ejemplo, las operadoras a los "internautas", siguen sus pasos muy de cerca. En un cable del 19 de enero de 2010, justo después de que el Manifiesto en defensa de los derechos fundamentales de Internet hiciera su aparición, el embajador Alan Solomont califica a Red SOStenible como la "tercera campaña" de acción de los internautas tras las medidas adoptadas por el Gobierno.
"Hacen ruido, pero no está claro cuán numerosos son o cuánta influencia tienen", dice, subrayando que su página de Facebook "tiene 7.000 miembros", pero que la del Manifiesto agrupa 200.000 y mantiene en la Red un diálogo muy "vivo".
