Elmundo.es - Tras una consulta al Consejo de la CMT, este organismo ha dictaminado que es perfectamente posible que unos vecinos se organicen para contratar un único acceso a Internet y compartir la señal. Hay, eso sí, tres condiciones, lógicas y coherentes (cito):
1.- El wifi no está abierto al público en general y, por tanto, el número de usuarios del wifi no es masivo.
2.- Los vecinos no tienen ánimo de lucro y entre todos sufragarán los costes de la red.
3.- No es la misma comunidad de vecinos la que presta el servicio de acceso a internet mediante wifi ni ofrece un servicio de atención al cliente.
Asimismo, la CMT establece que los establecimientos comerciales también pueden ofrecer este servicio -previo pago o gratuito- sin inscribirse como operadores siempre que no sea su actividad principal y sólo disfruten de la conexión los clientes del local. Aún así, la mayor parte opta por ofrecer este servicio a través de un tercero que, normalmente, sí es un operador de telecomunicaciones.
Decir todo esto no es tanto como decir WiFi libre y gratis, pero es un avance.
Hoy pueden ser edificios enteros que, igual que comparten una antena de televisión, usan la misma conexión a Internet e incluso comparten contenidos. Mañana podrían ser vecinos que gestionan su propia conexión y que, por qué no, podrían plantear intercambios de acceso con otras comunidades. Y pasado mañana comunidades que permiten la conexión desde la calle o plaza adyacente.
Ya que el Gobierno no facilita las cosas, tendrán que hacerlo los ciudadanos.
ENCUESTA BANDA ANCHA MÓVIL
1.- El wifi no está abierto al público en general y, por tanto, el número de usuarios del wifi no es masivo.
2.- Los vecinos no tienen ánimo de lucro y entre todos sufragarán los costes de la red.
3.- No es la misma comunidad de vecinos la que presta el servicio de acceso a internet mediante wifi ni ofrece un servicio de atención al cliente.
Asimismo, la CMT establece que los establecimientos comerciales también pueden ofrecer este servicio -previo pago o gratuito- sin inscribirse como operadores siempre que no sea su actividad principal y sólo disfruten de la conexión los clientes del local. Aún así, la mayor parte opta por ofrecer este servicio a través de un tercero que, normalmente, sí es un operador de telecomunicaciones.
Decir todo esto no es tanto como decir WiFi libre y gratis, pero es un avance.
Hoy pueden ser edificios enteros que, igual que comparten una antena de televisión, usan la misma conexión a Internet e incluso comparten contenidos. Mañana podrían ser vecinos que gestionan su propia conexión y que, por qué no, podrían plantear intercambios de acceso con otras comunidades. Y pasado mañana comunidades que permiten la conexión desde la calle o plaza adyacente.
Ya que el Gobierno no facilita las cosas, tendrán que hacerlo los ciudadanos.
ENCUESTA BANDA ANCHA MÓVIL