C. B. E./SEGOVIA / El Norte de Castilla
«Querido Sr. Rodríguez Zapatero.
Sé que es usted una persona ocupada (dirigir un país es lo que tiene...) pero le agradezco que lea personalmente esta carta (...) Aunque creo que lo más probable es que todo esto termine en el mismo sitio que las cartas de los niños a los Reyes Magos. (...) El miércoles me he enterado en la prensa (como también lo he visto comentado en algunas páginas de Internet) que la Sociedad General de Autores y Editores ha cobrado 518 euros a un grupo teatral de discapacitados psíquicos por la representación de obras protegidas por derechos de autor (...) Ahora me gustaría preguntarle algo. ¿Es cierto que dicho grupo está obligado a pagar tal cantidad de dinero por una representación en la que no van a ganar nada? Quisiera saber su opinión ya que usted me representa».
Este texto escrito por 'David' se puede encontrar en un 'blog' de Internet. Pero hay muchos mensajes y foros más. La repercusión que en la Red ha tenido la noticia sobre el cobro de los derechos de autor de obras protegidas por parte de la SGAE a un taller de teatro de discapacitados intelectuales de Fuentepelayo ha sido espectacular, como señala el presidente de la Asociación de Internautas, Víctor Domingo.
La noticia de Fuentepelayo expuesta en la web de esta agrupación -www.internautas.org- ha recibido más de seis ml visitas en pocas horas. Y además ha provocado toda una cascada de reacciones de los 'navegantes' españoles que han capturado la información que publicó EL NORTE el pasado miércoles.
De hecho, desde las páginas de Internet se está promoviendo una campaña para escribir al presidente del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero. En estas páginas se remite a una web de La Moncloa que corresponde al servicio de comunicación con el ciudadano del entramado del Ejecutivo nacional.
«Si también piensas que este caso es intolerable, escribe un correo electrónico de protesta a José Luis Rodríguez Zapatero. Deja también una copia de tu carta en los comentarios. Pásalo». Este es el enlace en Internet que da el paso para acceder a la página de La Moncloa. Allí, el remitente debe cumplimentar un formulario con los datos personales y el texto que se quiere adjuntar.
Según han señalado fuentes de este servicio 'on line' de atención y recogida de quejas y sugerencias de los ciudadanos, es el propio presidente quien responde en función de la gravedad y trascendencia del asunto que se trate. Aunque lo más usual es que sea un equipo adjunto el encargado de dar respuesta a las dudas o protestas que les llegan.
Disculpas
Hay que recordar que la SGAE se retractó de su actuación a las 24 horas de la publicación en este periódico de la denuncia hecha por el taller de Fuentepelayo, dirigido por Juan Cruz Serrano. En este sentido, la Sociedad devolverá el dinero que exigió al grupo teatral de personas discapacitadas y argumentó que todo se debió a un «error administrativo».
Una excusa que no convence a algunas personas relacionadas con el mundo escénico y con los colectivos de personas que sufren algún tipo de discapacidad. Por ejemplo, un representante de la Fundación Anade, organizadora de festivales similares al que desarrolla Serrano en Fuentepelayo, califica de «vergüenza» lo sucedido. José Colmenero afirma que nunca ha tenido problemas con la SGAE, pero que si la asistencia a un espectáculo benéfico es gratuita, la Sociedad no tiene ningún derecho a reclamar nada. Asimismo, explica que puede actuar en caso de que haya una relación comercial.
Por otra parte, el autor de la obra o de una canción puede dar su visto bueno para que se use su trabajo y comunicarselo así directamente a la asociación que lleve a cabo la iniciativa benéfica, pero la SGAE podría aún así inmiscuirse y pedir su canon.
«Querido Sr. Rodríguez Zapatero.
Sé que es usted una persona ocupada (dirigir un país es lo que tiene...) pero le agradezco que lea personalmente esta carta (...) Aunque creo que lo más probable es que todo esto termine en el mismo sitio que las cartas de los niños a los Reyes Magos. (...) El miércoles me he enterado en la prensa (como también lo he visto comentado en algunas páginas de Internet) que la Sociedad General de Autores y Editores ha cobrado 518 euros a un grupo teatral de discapacitados psíquicos por la representación de obras protegidas por derechos de autor (...) Ahora me gustaría preguntarle algo. ¿Es cierto que dicho grupo está obligado a pagar tal cantidad de dinero por una representación en la que no van a ganar nada? Quisiera saber su opinión ya que usted me representa».
Este texto escrito por 'David' se puede encontrar en un 'blog' de Internet. Pero hay muchos mensajes y foros más. La repercusión que en la Red ha tenido la noticia sobre el cobro de los derechos de autor de obras protegidas por parte de la SGAE a un taller de teatro de discapacitados intelectuales de Fuentepelayo ha sido espectacular, como señala el presidente de la Asociación de Internautas, Víctor Domingo.
La noticia de Fuentepelayo expuesta en la web de esta agrupación -www.internautas.org- ha recibido más de seis ml visitas en pocas horas. Y además ha provocado toda una cascada de reacciones de los 'navegantes' españoles que han capturado la información que publicó EL NORTE el pasado miércoles.
De hecho, desde las páginas de Internet se está promoviendo una campaña para escribir al presidente del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero. En estas páginas se remite a una web de La Moncloa que corresponde al servicio de comunicación con el ciudadano del entramado del Ejecutivo nacional.
«Si también piensas que este caso es intolerable, escribe un correo electrónico de protesta a José Luis Rodríguez Zapatero. Deja también una copia de tu carta en los comentarios. Pásalo». Este es el enlace en Internet que da el paso para acceder a la página de La Moncloa. Allí, el remitente debe cumplimentar un formulario con los datos personales y el texto que se quiere adjuntar.
Según han señalado fuentes de este servicio 'on line' de atención y recogida de quejas y sugerencias de los ciudadanos, es el propio presidente quien responde en función de la gravedad y trascendencia del asunto que se trate. Aunque lo más usual es que sea un equipo adjunto el encargado de dar respuesta a las dudas o protestas que les llegan.
Disculpas
Hay que recordar que la SGAE se retractó de su actuación a las 24 horas de la publicación en este periódico de la denuncia hecha por el taller de Fuentepelayo, dirigido por Juan Cruz Serrano. En este sentido, la Sociedad devolverá el dinero que exigió al grupo teatral de personas discapacitadas y argumentó que todo se debió a un «error administrativo».
Una excusa que no convence a algunas personas relacionadas con el mundo escénico y con los colectivos de personas que sufren algún tipo de discapacidad. Por ejemplo, un representante de la Fundación Anade, organizadora de festivales similares al que desarrolla Serrano en Fuentepelayo, califica de «vergüenza» lo sucedido. José Colmenero afirma que nunca ha tenido problemas con la SGAE, pero que si la asistencia a un espectáculo benéfico es gratuita, la Sociedad no tiene ningún derecho a reclamar nada. Asimismo, explica que puede actuar en caso de que haya una relación comercial.
Por otra parte, el autor de la obra o de una canción puede dar su visto bueno para que se use su trabajo y comunicarselo así directamente a la asociación que lleve a cabo la iniciativa benéfica, pero la SGAE podría aún así inmiscuirse y pedir su canon.
